La palabra Boro puede sonar poco familiar o desconocida para vosotros, pero tiene una larga historia en el mundo del índigo y de los tejidos japoneses.
El boro es un estilo tradicional de patchwork que nace de los valores olvidados de “mottainai”, la ética de preservar lo válido y evitar el despilfarro. Su nombre significa ” irregular ” o ” jirones ” y aparece en las áreas rurales japonesas en la ropa usada por los campesinos, comerciantes o artesanos desde la época Edo hasta principios de la Showa, es decir desde el siglo XVII hasta el XIX. Tengamos en cuenta que en la época feudal la mayoría de la población no podía permitirse kimonos de seda de lujo y obis como los que vestía la aristocracia.
An English translation below if you click ” Sigue leyendo”
El algodón era escaso en Japón hasta bien entrado el siglo XX, por lo que cuando un kimono o un edredón estaba muy gastado y el tejido estaba ya fino por el uso y se podía rasgar fácilmente, las mujeres de la familia lo parcheaban con pequeños trozos de tejido usando bordado sashiko. Durante generaciones, estos textiles adquirirían más y más parches, casi hasta el punto de ser imposible reconocer la tela original.
La belleza de la tela de boro se basa sobre todo en técnicas de costura y de tejido utilizados por las mujeres que lo hicieron. El uso diario requeriría reparaciones frecuentes, pero cada prenda tenía que durar suficiente tiempo como para ser heredada por las siguientes generaciones.
Cuando Japón entró en la era moderna y la producción industrial se convirtió en algo común, el estilo de boro desapareció. Es sólo ahora, en la era del “used denim” cuando las piezas antiguas de boro se consideran incluso piezas de museo. Tiendas vintage en Tokio y en otros países venden tapices y prendas cosidas y parcheadas a mano a un público desencantado por la uniformidad de producción masiva de otras telas.
Reconocidas marcas japonesas modernas están llevando el boro al siglo XXI, añadiendo está antigua técnica a sus colecciones. Kapital y Koromo son de esas marcas que han producido chaquetas de mezclilla boro, jeans, camisas e incluso bolsas . Están diseñadas imitando las prendas boro y los tejidos antiguos.
Mientras que en el pasado era por necesidad, ahora es una belleza estética que honra la historia.
Boro word may sound unfamiliar or unknown to you, but it has a long history in the world of indigo and Japanese fabrics.
Boro is a traditional style of patchwork born of the forgotten “mottainai” values, ethics to preserve the valid and the regret for wastefulness. Its name means “ragged” or “tattered” and appears in the clothing worn by peasants, merchants or artisans in Japan from Edo up to early Showa (17th – early 19th century ) in Japanese rural areas. In feudal times, most people could not afford the silk kimonos and obis worn by the aristocracy.
Cotton was not common in Japan until well into the twentieth century, so that when a kimono or a sleeping futon cover started to run thin in a certain area, the family’s women patched it with a small piece of scrap fabric using sashiko stitching. Over generations of families, these textiles would acquire more and more patches, almost to the point of the common observer being unable to recognize where the original fabric began.
The beauty of the fabric of boro is based mainly on sewing and weaving techniques used by women who made it. Daily use require frequent repairs, but each piece had to last long enough to be inherited through generations.
When Japan stepped into the modern age and industrial production became common, the boro almost disappeared. It is only now, in the era of “used denim” when the old pieces of boro are considered even museum pieces. Vintage shops in Tokyo and other countries sell textiles and garments sewn and patched manually to a disenchanted audience due to the uniformity of massive fabric productions.
Recognized modern Japanese brands are taking the boro into the XXI century, adding to their collections this old technique. Kapital and Koromo are some of those brands that have produced boro denim jackets, jeans, shirts and even tote bags. They are designed to mimic the old garments and boro fabrics. While in the past it was out of necessity, it is now an aesthetic beauty that honors the history.
Imagenes: hendels,maisondexceptions, furugistarjapan
Al fin encuentro material sobre el Boro. Pero es breve. No lo puedes ampliar con fotos, láminas antiguas? Estoy intendo,hacerlo. Y casi no encuentro referencias.
Millones de gracias.
¿Qué tipo de información quieres? Te puedo ayudar a buscarla….
I am sure this article has touched all the internet people,
its really really good post on building up new web site.
Neat post. There can be a difficulty along with your web site in firefox, and you could want to check this The browser may be the market chief and a large component of other folks will omit your superb writing because of this difficulty.
I just received, thanks
I like the helpful info you provide in your articles. I will bookmark your weblog and check again here regularly.
I’m quite sure I’ll learn lots of new stuff right here! Best of luck for the next!
Thank you!
Que linda web tienes!! Me encantaron todos tus post!! Me gusta muchísimo el reciclado y las historias que nos cuentas. Sigue convidándonos lo que sabes.
Desde México te mando un gran abrazo!!!